"Rejuvenece con el Rey de los Antioxidantes"

Rejuvenece, con el rey de los antioxidantes Proantocianidinas

Antioxidantes hay muchos, pero solo uno que te ofrece la máxima protección contra los efectos del envejecimiento, ¿lo conoces?
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Los antioxidantes son sustancias nutritivas que tienen el poder de frenar la oxidación celular provocada por los llamados “radicales libres”. Entre los antioxidantes, destacan por su enorme efecto protector unas sustancias no muy conocidas pero muy efectivas: las “proantocianidinas”, que son productos naturales de plantas, derivados de la corteza del pinus Marítima, un pino de la costa europea, así como de las semillas de las uvas.
Numerosos estudios han demostrado que las proantocianidinas constituyen un importante contrapeso al daño que provocan los radicales libres, por lo que sí pueden detener los efectos del envejecimiento.

¿Por qué lo de rey?

Porque, hoy por hoy, las proantocianidinas son las sustancias devoradoras de radicales libres más eficientes que se conocen. Estudios de laboratorio in vitro —fuera del cuerpo— han demostrado que, como antioxidantes, son 50 veces más efectivas que la vitamina E y 20 veces más poderosas que la vitamina C.Asimismo, a diferencia de otros antioxidantes, las proantocianidinas tienen el poder de cruzar la barrera cerebro-sangre, protegiendo al tejido nervioso cerebral del daño por oxidación y contaminación en general.

¿Qué hacen en el cuerpo?
Inhiben la acción de las enzimas que causan la inflamación, reducen la producción de histamina y mejoran el recubrimiento de las arterias. Asimismo aumentan la resistencia al ataque de mutágenos, los cuales pueden causar enfermedades cardiovasculares.
Las proantocianidinas también restauran la integridad capilar y favorecen la circulación, lo que facilita la oxigenación y nutrición de cada célula del organismo. Y una mejor circulación es valiosa para todos, pero especialmente para fumadores, pacientes de diabetes, infartos, artritis; para personas con piernas hinchadas y mujeres que están tomando anticonceptivos orales.
Por si esto fuera poco, las proantocianidinas tienen la capacidad única de unir las fibras de colágeno, ya que ayudan a reconstruir sus entrelazamientos y a revertir parte del daño sufrido por lesiones musculares y por el ataque de radicales libres.
Más aún, las proantocianidinas inhiben aquellas enzimas propias del cuerpo que, de manera natural, rompen el colágeno. Tan maravillosas sustancias ayudan, pues, a recuperar la flexibilidad de piel, articulaciones, arterias, capilares y otros tejidos.

¿Cómo consumirlas?
La manera más fácil es a través de un suplemento dietético que garantice alta pureza. Se puede empezar tomando cuatro tabletas al día: dos con el desayuno, una con la comida y una con la cena. Al cabo de 14 días, el cuerpo estará saturado de ellas y ya sólo será necesario tomar dos tabletas diarias, una con el desayuno y otra con la comida.

¿Qué tan rápido actúan?
Las proantocianidinas tienen una biodisponibilidad casi instantánea en los seres humanos, por lo que, en su mayor parte, se absorben y van a todos los tejidos en tan solo 20 minutos.¿ Cuánto tiempo permanecen en el cuerpo?Tres días. Circulan en fluidos corporales y se mantienen en el colágeno durante 72 horas. Posteriormente se eliminan, poco a poco, a través de la orina y, en menor medida, la transpiración.

¿Qué sucede si no se obtienen suficientes proantocianidinas?
Sin la protección adecuada de antioxidantes, en especial del más potente que son las proantocianidinas, el cuerpo sencillamente envejece más rápido, pues los radicales libres quedan en mayor libertad para causar daño por oxidación a las células y tejidos musculares; las articulaciones se endurecen y la piel se arruga más pronto. El daño debido a los radicales libres también juega un papel en las enfermedades degenerativas que asociamos con el envejecimiento, tales como artritis, desórdenes circulatorios, diabetes, cirrosis hepática, enfermedades cardíacas, ateriosclerosis y muchas más.

Lo que las proantocianidinas hacen por tu salud y tu belleza

• Combaten arrugas.

• Atacan sustancias conocidas como radicales libres, las cuales son responsables principales del envejecimiento.

• Restauran el colágeno, sustancia vital para la elasticidad y belleza de la piel.

• Protegen vasos sanguíneos débiles y evitan la aparición de “venitas” en las piernas.

• Disminuyen las molestias de las várices.

• Favorecen la circulación y alivian las hemorroides de manera notable.

• Evitan la acumulación de grasas en las paredes de los vasos —ateroesclerosis.

• Reducen los síntomas relacionados con las úlceras estomacales debidas al estrés.

• Alivian la inflamación en las articulaciones, por lo que son ideales para tratar la artritis.